Las telas de microfibra tienen una textura y se sienten similares al ante. La principal diferencia entre los dos materiales es que la microfibra es más fácil de limpiar y es mucho más barata. Como la microfibra es un material sintético, tiene una superficie fuerte y duradera que no muestra mucho daño. Su sofá puede mostrar algunos rasguños menores causados por el uso de productos de limpieza incorrectos, garras de animales o por objetos más pesados que se frotan contra la tela. La limpieza generalmente elimina u oculta esos rasguños.
Paso 1
Presione el accesorio de tapicería de su aspiradora en el área rayada del sofá. Mueva la aspiradora a lo largo de la superficie rayada y frote el accesorio en pequeños círculos. El movimiento reajusta las fibras, lo que puede ocultar los arañazos.
Paso 2
Sumerja un paño suave, como un paño de microfibra, en agua. Exprima el exceso de agua del paño y frótelo contra los rasguños. Trabaja la tela mojada sobre el sofá con movimientos circulares. Deje que el líquido se seque durante varias horas. El proceso puede ocultar o eliminar rasguños menores.
Paso 3
Limpie los rasguños con un limpiador especial diseñado para superficies de microfibra. Los limpiadores no dejan marcas ni manchas. Aplique el limpiador al sofá y límpielo con un paño seco y suave. Los arañazos causados por las manchas se sueltan con la limpieza.
Paso 4
Frota una pequeña cantidad de vodka en el sofá de microfibra. Si aparecen marcas de arañazos en un área seca o áspera del sofá, frótelas con un cepillo de dientes viejo. El vodka se evapora y no deja manchas de agua, y puede ayudar a eliminar arañazos.
Paso 5
Cubra el sofá rayado con cojines y / o una funda como último recurso. Los cojines le dan a su sofá una apariencia más cómoda, al tiempo que ocultan sofás más pequeños. Para sofás más grandes, una funda deslizante oculta por completo esos puntos dañados.